La Cita

Me alcanzó la crisis de los treinta, y me fui a celebrarlo a la FNAC, no hay mejor terapia que fundirse una pasta para remediar un ataque de ansiedad.

Circodelia

I Want To Break Free

Yo como siempre voy con retraso. Ayer se cumplían los 65 añitos desde el nacimiento de ese grande que fue Freddy Mercury, un tipo fascinante y medio loco que revolucionó el mundo (y punto).  Os recomiendo pasaros por la recopilación de brutales videoclips de este genio por mi querida Persefone. Yo me quedo con una de esas canciones que consiguen cambiar un humor negro en todo lo contrario con solo escuchar una estrofa. No hay nada mejor que pasar la aspiradora al ritmo de Freddy Mercury… Brutal, sorprendente e innovador. Aún a día de hoy.

Todo anime termina siendo un musical…

Probablemente debería advertir a despistados que esta entrada está dedicada a gente realmente friki, y el que avisa no es traidor…

El caso, es que no sé porqué estos días me acordaba de mi buena amiga Sara, una enorme enamorada del anime «El dulce hogar de Chi»(y quien no…), que llegó a memorizar la cancioncilla del inicio (openings, para los amigos) y lo mejor de todo a cantármela con todo el su talento incuestionable.   ^___^

Y dado que hace mucho que no dejo caer nada en Nocivo Domingo relacionado con los buenos (y sufridos) nipones, me decidí a dedicar una entrada a su infravalorada y poco comprendida música. Es cierto que todo el contacto que tengo con ella es a causa del anime, pero una vez que pasas una fase inicial de rechazo hacia su idioma y las voces femeninas estridentes, empiezas a adaptarte (si ves regularmente anime estás obligado, ya que la música es otra característica básica en estas producciones) y más tarde logran alcanzar el podium de canciones preferidas (incluso).

Yo, particularmente soy más dada a amar los endings que los openings, y es que, aunque la animación suele ser más sencilla (o incluso no hay animación), la canción es escogida con mucho cuidado y normalmente representa la verdadera esencia del anime que estamos viendo. Ahora estoy particularmente obsesionada con el ending del número 1 de esta lista. No lo puedo remediar…

10._Opening: Bounem no xamdou

9._Ending: K-ON!

8._Opening: Ga Rei Zero

7_Opening: Eureka seven

6_Ending: Darker than black (ryuusei no gemini)

5_Ending: Mai Hime

4_Ending: Canaan

3_Ending: Full metal Panic! The second raid

2_Opening: Elfen Lied

1_Ending: Noir

 

Florence Welch ♪ ¡A bailar! ♪

Si hablamos de música inglesa contemporánea tenemos que hablar de Florence and the Machine, el nombre bajo el que se esconde la artista Florence Welch. Su primer disco en el 2009 (Lungs), atrajo a gran parte de la crítica y el público inglés (y al de los alrededores) por esa mezcla folk-rock unida a la carismática voz de la artista.

Además, nuestra querida Florence tiene un punto salvaje, pues no en vano se crió musicalmente hablando rodeada del  punk. «Desde que tenía 16 años he frecuentado a bandas punk que hacían canciones sobre perros muertos y cristales rotos, o cosas del estilo,» comenta, «así que me tira un poco lo oscuro, lo visceral. Enloquece a las masas.»

A mi me lleva alegrando días lluviosas desde que la descubrí haciendo zapping en el sol música (cuna de grandes artistas…ejem…) y la redescubrí en la banda sonora de esa gran serie inglesa que es Misfits. Tiene la capacidad de que tus pies se muevan solos con solo escucharla, y que te den unas ganas incontrolables de salir de casa…

Florence nació en Londres, mide sus 1,78 metros y tiene tan solo 24 añitos.  Ya están preparando nuevo album, y solo esperamos que no bajen su ritmo ni su originalidad. Aquí está su genial página web http://florenceandthemachine.net/

 

La Nota de Magrat:

☼ ☀ ☁ ☂ ☃

 

(¡¡¡Bien hecho!!!)

La Cita

Me advierten «mira, no juegues con fuego, respeta al menos las reglas del juego o hazte a la idea de tener a mano un extintor».
Declaro que me bato en retirada, no sé jugar con las cartas marcadas, será que nunca tuve vocación de ganador.

Luis Eduardo Aute

Ilustración: Range Murata

Janelle Monáe

Janelle Monáe me encanta. No lo puedo evitar.

Ya ni siquiera recuerdo de donde la saqué o quién me la recomendó, pero aquel debió ser un buen día.

Será por su música negra mezclada con sonidos de la calle, con un ritmo urbano más que pegadizo, o serán las ganas de bailar (o al menos de caminar rápido si vas con tus cascos por la calle) que te entran al escucharla, o será su aspecto andrógino, o serán esas ganas de dar guerra que quedan plasmadas en sus discos.

Janelle Monáe tiene tan solo 25 años. Y sabe hacer música de los años 50, del 2011, recuerda a Elvis a veces, sabe bailar bien, escribe sus propias canciones, tiene un poco de rock, sabe hacer un buen vals, grita solo si es necesario y nació en Kansas, Totó.

John Lennon, el músico

Hace exactamente 30 años moría John Lennon.

A día de hoy Lennon es un símbolo, ya no es persona ni personaje, solo con escuchar su nombre a nuestra cabeza nos vienen instantáneamente palabras como paz, activismo, Beatles o imagine. Se ha convertido tan rápido en una bandera como el propio Che Guevara y ha perdido todo lo malo y lo realmente bueno que tenía su persona.

Pero no voy a juzgar, ni abrir llagas hablando de la personalidad de Lennon, de sus errores y fracasos, de las salvajadas de la juventud, de su relación con la mujer más odiada de la memoria colectiva, de lo que pudo haber sido, de lo que fue, de lo que significó, del golpe que fue su muerte, del miedo, de la esperanza… De todo eso no quiero (o no puedo hablar), porque al fin y al cabo yo no viví esa época. Cuando nací, Lennon llevaba ya 4 años muerto, por lo que nunca podré conocer el significado real de vivir aquel tiempo, sentir el fenómeno Beatle, y después el activismo político y solitario de Lennon, nunca conoceré la terrible sensación que sintieron tantos con su muerte… No creo tener tan raro honor de comentar estas cosas, pues yo viví ya en un mundo en el que Lennon era ya una leyenda.

En cambio, sí me siento con fuerzas de hablar de su música, pues al fin y al cabo crecí con ella. Muchos se preguntan cómo puede ser que tantos años después del nacimiento de los Beatles, éstos sigan calando tan hondo en las generaciones venideras. Probablemente, el ser el punto de inicio de toda la música que se fabrica hoy en día tiene algo que ver. Todos los músicos que escucho y admiro hoy en día, sienten una insana admiración por Los Beatles, y eso influye, ¿Verdad?

Crecer escuchando a Los Beatles es algo que tengo siempre que agradecer, porque es algo que seguramente haya influído en mi manera de entender el mundo, aunque no entendiese sus letras, aunque solo fuera por su manera de entonar una canción, o por los instrumentos que les gustaba descubrir. Es algo que dejas y vuelves, primero fue la niñez, luego en la adolescendia, y al comienzo de la facultad recuerdo haber tenido el comienzo de la obsesión por los discos de Lennon en solitario, que a día de hoy aprecio aún más que los de los Beatles.

Y es sorprendente que pasen los años y sigas interesándote por su música y por su historia, que traduzcas desesperadamente sus letras y que escuches cada acorde, que busques respuestas en sus canciones y que te relajes con ellas. Se puede decir que John Lennon formó a varias generaciones con sus letras y sus canciones, el mundo se lo agradece cada día escuchando sus canciones pero también se ríe de él poniendo palabras en su boca que él jamás dijo, o vendiendo banderas o pósters con su cara, o haciendo de su imagen un anuncio publicitario. El mundo en el que vivimos también es producto de su música, para bien o para mal.

 

Canciones para el tiempo y la distancia

Hay canciones que me han perseguido a lo largo de mi pequeña historia. Da igual las veces que pierda un disco o se me borre esa canción, acabo volviendo a necesitarlo años después, vuelvo a comprar el disco o descargar la canción. Son pocas las letras que consiguen ponerme los pelos de punta de la misma manera que cuando tenía 13 años. Mis gustos han cambiado, y mucho, sin embargo hay canciones que no se me olvidan, y que cada cierto tiempo necesito escuchar, y es que tanto tiempo después siguen diciendo verdades como puños o siguen transmitiendome exactamente las mismas cosas pero de manera diferente…

10_ Tu me acostubraste: Chavela Vargas

9_Ciudad de pobres corazones: Fito Páez

8_El necio: Silvio Rodriguez

7_Iguazu

6_Canto (con el mismo dolor): Enrique Bunbury

5_Cenizas en el aire: Ariel Rot

4_No son horas: Andrés Calamaro

3_Calle Melancolía: Joaquin Sabina

2_Soñar es desear la dicha: Evangelina Elizondo

1_Ultimamente: Ismael Serrano

Il Trovatore

Ópera ‘Il Trovatore’ en el Teatro Campoamor de Oviedo. Giuseppe Verdi (1813-1901). Libreto de Salvatore Cammarano y Leone Emanuele Bardare, basado en el drama El Trovador de Antonio García Gutiérrez (1836). Dramma lirico en cuatro actos.

El Lunes pasado tuve la ocasión de acudir a mi primera ópera, Il Trovatore de Verdi. Lo cierto es que acudí al teatro con cierto miedo de que se me hiciera aburrida, pesada o incluso algo ridícula. Mis escasos conocimientos del mundo operístico se basan en los pocos fragmentos que cogí alguna vez por la televisión y algún cd que encontré por casa.  En cambio allí fui, con escepticismo pero emoción ante un espectáculo completamente nuevo y desconocido por mi.

Y puedo gritar a los cuatro vientos que me encantó.

Ya no sólo porque la historia no resulta en absoluto aburrida o pesada, si no que nos es narrada como un cuento de hadas o uno de esos cantares antiguos. Una tragedia llena de inocencia y romanticismo. Por otra parte, una vez que te sientas en tu butaca y se apagan las luces, te encuentras arrastrado a otra época y lugar, te absorbe por completo la situación, las voces, la historia. Es una sensación extraña y maravillosa.

De los actores y sus voces poco puedo decir objetivamente, a mi me parecieron inmejorables, y pese a que tengo cero conocimientos, muchas personas mucho más experimentadas me dieron la razón.

Además esta representación jugaba con una nueva baza, el decorado. O más bien la ausencia de él hicieron que la obra fuera quizás más fuerte y sorprendente, con un magnífico juego de luces y telares.

Julian Reynolds (director musical) ha explicado que los personajes de «Il Trovatore» son algo nunca visto en la ópera, porque muestran la «revelación de la psicología de Verdi; una guerra metafísica con la tierra» y que es tan «dramática y explosiva» que puede parecer «un poco Capitán Alatriste». De la estructura de esta ópera Reynolds ha destacado que gracias a su perfección es «musical, íntima y fantástica».

Por otra parte, Gilbert Delfo (director de escena) ha comentado que «Il Trovatore» es un «cuento de hadas» que, con un resultado «olímpico y bello», narra muchas cosas y que consigue una gran armonía entre música y voz, compás necesario para que el arte dramático no «mate» a la música.

Magrat Ajostiernos dice:

Estoy tan emocionada que hasta he conseguido una copia para escuchar una y otra vez y poder rememorar el momento. No creo que sea algo que pueda olvidar, y espero que sea la primera de muchas óperas en mi vida. Desde mi humilde opinión es un espectáculo que nadie debería perderse, una ópera no es algo que se pueda imaginar o ver por televisión, hay que estar allí, vivir y vibrar con los actores, sentir la música y la historia. Es un derroche de arte.

La cita

«Y en vista de que acechan fieros tiburones habrá que pertrecharse para la batalla, me arranco el alma y me maqueo de canalla y saco los cañones… Y disparo, disparo, disparo a ver si mato alguna rata pero como no veo muy claro acabo metiendo la pata… y me sale siempre el tiro por la culata.»

Luis Eduarto Aute

Fotografía: http://www.lwinram.com/index.php